El incremento de la actividad turística que se evidenció en los últimos años en la  Provincia de Tierra del Fuego, dio como resultado el aumento de  embarcaciones y de las frecuencias de los recorridos en las excursiones marítimas realizadas en el Canal Beagle.  Esto trajo como consecuencia algunas prácticas que,  a corto o mediano plazo, pueden afectar al ambiente y a la calidad de los servicios turísticos, entre ellas: la superposición de las visitas, tanto en los avistajes como en los desembarcos; la contaminación acústica, y otros disturbios relacionados directamente con la actividad.


En este escenario, en abril de 2005 la Asociación de Guías de Tierra del Fuego impulsó y convocó un encuentro (1er. Taller Onashaga) entre todos los actores involucrados donde se presentó la problemática  y la necesidad de consensuar una nueva forma de desarrollar las excursiones marítimas.
Como resultado,  en octubre del mismo año se firmó el COMPROMISO ONASHAGA.

El COMPROMISO ONASHAGA originalmente se traduce en 10 recomendaciones tendientes a buscar soluciones a los problemas identificados  y a mejorar la calidad de las visitas. Dicho acta fue suscrita  por todos los actores involucrados, y posteriormente se creó una unidad de gestión denominada Comité de Seguimiento.